Todos hemos estado en él, pero nadie lo recuerda.
Suena algo loco, pero analicemos un poco lo que nos dice el libro del Génesis.
Dice que el hombre y la mujer estaban desnudos, pero no se avergonzaban el uno del otro; ¿han visto como a los niños no les importa si están vestidos o si están desnudos?.
Nos habla del fruto prohibido, el cual es el arbol del conocimiento para distinguir entre el bien y el mal; eso nos pasa cuando ya no somos tan niños y ya empezamos a distinguir entre lo bueno y lo malo, con lo cual somos expulsados del paraíso. Y entonces comenzamos a pecar.
Otra cosa de cuando somos niños o, mejor dicho, de cuando estamos en el paraíso: no nos importa que vamos a comer hoy o mañana, no nos importa si mañana se desploma la economia, no importa nada más que los juegos.
En el mundo de los niños no existen el odio, el rencor y todo se comparte.
En conclusión todos estuvimos en el paraíso.
jueves, 10 de diciembre de 2009
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